Mirada de Eloy Couceiro

Aquí os dejamos un vídeo que recoge la energía del momento final del viaje, que refleja el espíritu de la caminata.

https://vimeo.com/770241968/66117a7084

“La mirada en busca del sentido” Así encabeza Eloy Couceiro la página web eloycouceiro.com donde recoge parte de su trabajo como fotógrafo, diseñador gráfico, poeta y cineasta. Es Eloy una persona de una extraordinaria sensibilidad  que enseguida conectó con la esencia de la propuesta de “Caminando por la vida”. Sumándose a participar en varias das polavilas, a acompañarnos en la última etapa, en la churascada final y en varias de las actividades que venimos desarrollando desde entonces, hemos tenido la oportunidad de que su visión personal y onda haya ido enriqueciendo nuestra propuesta de nuevas perspectivas y matices. Un acompañamiento que fue sumando peso, desarrollando un compromiso y una complicidad que ha acabado por traer de fuera al interior del grupo la voz de Eloy. Ha sido el encuentro con Eloy otro regalo más de nuestro caminar.

Escribe Eloy “Podría ser nuestra mirada esa tenue luz que modestamente nos ayudara a cambiar las cosas”. Estando con él puedes sentir que está verdaderamente ahí, que su mirada es profunda y compleja y está enfocada en la búsqueda de nuevos caminos que ayuden a cambiar las cosas. Tiene Eloy no sólo el don de la mirada, sino el don de la pregunta. De esa pregunta sabia que a la vez que te interpela te muestra nuevos ángulos y posibilidades, que te invitan a reflexionar. De esas preguntas, de su sensible mirada y de la complicidad desarrollada entre nosotras nace este hermoso vídeo que recoge con tanta belleza lo que ha sido el espíritu de “Caminando con la vida”.

“Se acercan tiempos duros en los que necesitaremos las voces de aquellos que sepan ver las alternativas, que recuerden la libertad y que imaginen que aún cabe esperanza. Los realistas de una realidad más grande” Eloy Couceiro.

“No se puede ser optimista en un mundo tal como está, ni esperanza, ni optimismo, pero una mayor voluntad de seguir haciendo, una mayor voluntad de seguir caminando como un caracol por la vida, haciendo ¡fer! ¡ fer cosas! ¡Menearse y a menearlo todo!” Charlie.

Caminando por a vida a posteriori

“Aunque la mayoría de personas no va hacia ninguna parte, es un milagro encontrarse con una que reconozca estar perdida” José Ortega y Gasset

“Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.”

Antonio Machado

“Pero les pedimos que no nos dejen solos, que sigan caminando con nosotros y nosotras, porque caminar
en comunidad es muy bonito y se aprenden muchas cosas durante el trayecto.”
Sociedad civil las abejas Acteal

“Las palabras nunca alcanzan cuando lo que hay que decir desborda el alma” Julio Cortázar

“E, se podo escribir de xeito,
que hasta un neno o entenda.
quedareime tan contento
e sentireime poeta”

Alberto Calvin Corredoira

“No me gustan las citas, porque generalmente no las entiendo” Yago Xenrón

Pero ¿no estamos todas un poco perdidas? El caminar nos ayuda a situarnos y cuando se hace en comunidad se aprenden cosas bonitas, algunas de las cuales no se pueden explicar con palabras, se explican mejor con silencios, miradas, lágrimas o abrazos.

Todavía estoy asimilando el viaje que realizamos este verano de 2022 cuatro personas por senderos de emtrambasaguas, nuestra comarca de vida y de origen. Un viaje físico, pero sobre todo emocional y vital. Caminamos al encuentro de los paisajes y las historias escuchadas de boca de nuestras padres y abuelas. Anduvimos atentos a maravillarnos con cualquier vestigio del anhelando paraíso de nuestra niñez, la sencillez humana y su generosidad, la fala viva, la exuberancia natural, la generosa diversidad animal, el vergel vegetal. Sabiendo que poco queda de ello, que menos ha de quedar, caminamos también para decir nuestro respeto y admiración, nuestro dolor y despedirnos con amor de un mundo que desaparece.

“E todo era alegría / e vida na aldea, / entonces había / o que xa non queda / Non queda xente / para
luitar ca terra, / e a que queda sinte / dolor e pena / vendo tristemente / morrer esta aldea.”

Trato de hacer una valoración del viaje y siento que esto que me palpita es lo mismo que anticipaba, todo se ha cumplido, pero agrandándose extraordinariamente. Las sensaciones, el poso del viaje, no pueden ser más terribles ni más hermosas, la total destrucción de un territorio, el fácil entendimiento humano.

Caminando se ve todo mucho más despacio y se tiene la pausa y el tiempo necesarios para reflexionar y apreciar con más detalle la catástrofe ecológica, el desierto de biodiversidad en que se ha convertido nuestra comarca. Un territorio exprimido y explotado puesto al servicio y los intereses económicos de unos pocos que no habitan el territorio, que están allá en otros mundos en ciudades cada vez más alejadas. Un expolio que se ha podido producir porque previamente la comarca ha sufrido un proceso colonial de represión autoritaria y de minusvaloración cultural. El convencimiento de que no hay futuro, que viene de “la certeza” de que no hay presente, de que esto no vale nada y como no vale nada podemos venderlo, destrozarlo por unas migajas que ya nos dan más de lo que vale y que con suerte nos permitirán marchar a otro lugar donde poder prosperar y olvidar esta mierda.

Todo el territorio destrozado, una catástrofe ecológica total de dimensiones inabarcables, silenciada, escondida, por los intereses económicos de unos pocos. Decenas de kilómetros de costa muerta, con el bosque de algas cantábrico extinguido, arrasado por la contaminación química de las empresas del Navia que vierten sin vergüenza sus desechosal mar. Un inmenso desierto de eucaliptos que se extiende aniquilando por completo la biodiversidad en el noroccidente; cadenas de enormes pantanos que reenriquecen a los re-ricos en algún lugar lejos de aquí; un mar de maíz transgénico, en una región hipócrita que se jacta de ser “libre de transgénicos”; acuíferos contaminados por el permanente riego de purines; tasas extraordinariamente altas de canceres en una comarca rural. Nuestra amada casa se ha convertido en un erial insalubre, ponzoñoso y nadie dice nada. Se ha impuesto el estruendo del progreso que acaba con toda forma de diversidad cultural, lingüística, animal, vegetal, de libertad de expresión o de información.

Y sin embargo, de la otra parte, hemos encontrado una gran sabiduría humana, un gran amor por lo propio. El encuentro humano fue extraordinario. No imaginaba encontrar, conocer a la gente de Llombatín y Bullaso, los de Buseco, los de Folgueirón, Alberto Pardiñas, el museo de la cuchillería, José Luis “Patas”, Eloi Couceiro, Emilia, los de Lourido y tantas otras que nos enseñaron los hermosos caminos que transitan y nos orientaron a nosotras que íbamos dando tumbos perdidas en un mar de preguntas. Gente a la que admirar y que han dejado un poso de verdad, de autenticidad. Algunas voces resistentes que cantan a la vida rural, a su lengua y a su cultura.

“Porque son os meus poemas / os de un simple aficionado, / os de un home de aldea /que quere cantarlle ó agro, /porque hai que ser poeta / cando se vive no campo.”

Digo cantan, porque lo que hacen, unas veces con museos de artesanía, otras con columpios de vistas maravillosas, con poemas o con asociaciones, y las más de las veces simplemente viviendo con amor y admiración hacia su cultura y su territorio, es música, es un canto a la vida. Son voces que rompen el reniego, son voces de vidas felices. En nuestro caminar nos acompañaron los que habitan en una casa que aman. Que no es que no sigan quedando en entrambasaguas algunos de los que piensan que su vida vale menos que la de otros, que no hay futuro, que no hay presente. Sin embargo, estos no se pararon a estar con nosotros o a participar nas polavilas, nos dieron conversación así como de pasada, con desgana y luego siguieron a lo suyo, a lamentarse, a negarse o a despreciar el territorio desde cualquier alcaldía.

Además del abrazo con nuestras raíces, con el paisaje y el paisanaje, este caminar tenía otra seducción, otro encanto: el de convivir con Carmen, Charlie y Cris que, aunque compartíamos amores y razones, algunos éramos meramente simpáticos conocidos sin relaciones profundas de amistad. El discurso, serio, actual, de la competitividad, nos auguraba que en una experiencia de tanto esfuerzo físico, de caminos cerrados o improvisados, en medio de una cocedora ola de calor, de mucho trabajo organizativo, de tanta carga emocional, de dormir en suelo duro y comer improvisando, de convivencia a tiempo completo; no cabía otra que el desencuentro. Pero hete aquí que no, que no hubo desencuentro. Pero tampoco fue la experiencia más transcendental de nuestra vida y nos hemos hecho amigos inseparables. Desde luego que han surgido lazos de amistad entre nosotras, pero sobre todo el viaje confirmó que es fácil ponerse de acuerdo entre personas que dan espacio a las demás para ser con sus defectos y sus virtudes. Que es natural establecer una relación de cooperación desde el respeto, que frente a la exigencia, la comparación o la envida, opone el placer de la generosidad, el hacer uno mismo, el apoyo mutuo y los cuidados compartidos. Carmen, Charlie y Cris, que experiencia tan hermosa he vivido con y gracias a vosotras, de corazón os digo que espero que esto no haya sido porque seáis unas personas extraordinarias, sino porque sois simplemente humanas.

…y esto era lo que yo estaba buscando… y hoy estoy tan triste, tan feliz y agradecido, tan asustado y descorazonado.

E chegou o desarrollo, / que así lle chamaron, / e engordou o gordo / a costa do flaco, / e ó final do conto / este é o resultado

Todos os versos na nosa fala que acompañan este texto son do libro “Taramundi, mil versos” de Alberto Calvin Corredoira, Editorial canela. Outro regalo desta viaxe, un extraordinario libro que podeis comprar en: w.w.w.editorialcanela.gal

Escrito por Yago Xenrón

¡GRACIAS!

Gracias ao Territorio recorrido:

…aos seus valles e montañas,

… aos seus ríos e mar Cantábrico,

… aos Ventos, Sol, Agua e Terra,

… aos Seres visibles e invisibles que lo habitan;

Gracias aos pequenos grandes pueblos transitados:

… Lourido e Goxe (en San Tirso de Abres);

… Lourido, Taramundi, Pardiñas, Veiga de Llan, Llan, Valín, O Teixo (en Taramundi);

… Paramios, Folgueiras, Piantón, A Veiga, Miou, Louteiro, Abres e Ferraría (na Veiga);

… A Garganta e Bustapena (en Vilanova de Oscos);

… Pastur, Carballal, Folgueiróu, Llanteiro, Bullaso, Llombatín (en Illano);

… El Rebollal, Meróu, Langrave, Pendía, Miñagón, Serandías e Llanteiro (en Boal);

… Villayón, Castañera, Granas (en Villayón);

… Piñeiro, Belén da Motaña, Buseco, Leiriella, Folgueirón y Luarca (en Valdés);

… A Roda, Tapia, Xárias, Riocabo (en Tapia de Casariego);

… Tol, A Grandela, Boudois e Presno (en Castropol).

Gracias a todas as grandes personas que:

… compartiron algunhos pasos con nosoutras: Iria e Berta, Sara e Isabel, Manuel, Jose Luis Patas, Milia, Claría e Belarmino, Isabel e Quique, Isabel e seu fillo, Dora e Eloy.

… participaron de algunha das polavilas: Alberto, Juan, Carmen, Dora, Julia, Pepe, Adrián e Francisco en Pardiñas; Jesús e Francisco en Taramundi; Amparo, Antonio, Eloy e Manuel na Garganta; Isabel, Claría, Belarmino, Isabel, Quique, Irene, Isaac, Jose Luís Patas e Manuel en Bullaso; Lola, Javi, Verónica, Jose Luís Patas, Nina e Jose Antonio en Serandías Luis Pachico, Balbino, Jose, Eloy, Alejandro e Menchu en Tapia de Casariego; Xuaco, Severino, Daniel, Eloy, Nuria, Eduardo, Rosa, Adrián, Manuel e Isabel no Monte de Pousadoiro.

… participaron da churrascada de celebración en Lourido: veciñ@s de Lourido; veciñ@s de Llombatín e Baboreira; familias de Olga y Jose, de Vanina e Dani, de Marian e Pablo, de Lola e Javi; Manuel, Adrián, Rosa, Eloy e Menchu. Un especial agradecimiento a Ramiro, “Trallero”, que fixo un delicioso churrasco; a Dora, Isabel, Lita e Rosa que aportaron os deliciosos postres; e a Manuel que cuidou del café de pota.

… nos mostraron e compartiron un pouco dos seus proyectos vitales: Juan Carlos en Pardiñas/Taramundi, Ana e David en Buseco/Valdés, Astrid e Andrés en Folgueirón/Valdés.

… nos foron esperar al tren: Serwa en Valdés, Menchu e Dani e familia na Roda.

….conocimos ao largo do camín e con os que puidemos compartir un pedacín: Pepe e Manuel Calvín do Valín, Joaquina de Belén da Montaña, e Julián de Buseco.

… nos apoyaron logísticamente de diferentes formas: Carmen en Taramundi, Manuel en Folgueiras, Lola e Kali en Serandías, Joaquina en Belén da Montaña, Ana en Buseco, Astrid e Andrés en Folgueirón, Irma da Moleda e familia en Xárias; Dani, Marta (a pescadeira) e Manuel en Pousadoiro, e Lita e Jose en Lourido. E un agradecimiento moi especial a Adrián, Manuel, Marta e Rosa.

Gracias as abuelas de Carmen e Cristina, Carmen e Irma, con as que compartimos pedaciños especiales no inicio ou fin da caminata.

Gracias aos dous poetas rurales que nos deleitaron con as suas poesías ao longo desta Caminata: Alberto Calvín de Pardiñas/Taramundi e Quique González de Roxíos/Boal.

Gracias a Javi e Eloy por inmortalizar algunhos dos momentos de esta experiencia.

Gracias a Eva por as camisetas que nos fixo con tanto Amor e Arte.

Gracias aos que nos acompañásteis virtualmente a través do Canal do Telegram.

Gracias aos que nos mandávais mensajes de apoyo, inspiración e forza a través do Telegram, Whatsapp ou Blog.

Gracias por a OPORTUNIDAD de CONECTAR con as HERIDAS e MARAVILLAS do TERRITORIO que habitamos!

Gracias por as incontables CARAS de LISTA!

Gracias por tanta ABUNDANCIA, GENEROSIDAD, ALEGRÍA, AMOR, RESPETO, AUTENTICIDAD e PRESENCIA compartida!

Gracias por tantos APRENDIZAJES e INSPIRACIOIS recibidas!

Gracias por tantos MOMENTOS GENUÍNOS e INOLVIDABLES!

Gracias a nosoutras mismas, que dixemos SÍ a Caminar por a Vida!

GRACIAS a VIDA!

CARA DE LISTA

Primeras reflexiones y aprendizajes antes de empezar el camino

Pues resulta que llevo unos días con una sonrisa instalada en la cara, que siento los carrillos enrojecer y que me brillan los ojos. Vamos que a medida que se acerca el día de comenzar esta aventura de “Caminando por a Vida” se me va poniendo cara de listuco…¿listuco? Os preguntáis. No será, por lo que cuentas, que se te pone cara de bobalicón, cara de tonto, afirmáis. Y sí, toda la vida cuando he tenido esta cara motivada por la alegría y la ilusión me han dicho que tengo cara de tonto, pero esta vez me he parado a pensar y me he dado cuenta que es otro mecanismo más de represión. ¿Cómo que cuando estas contento, ilusionado, entusiasmado, tienes cara de tonto? Cara de tonto la tienes tú que estás amargado, todo el día enfadado, explotando y machacando a la tierra y a los demás en nombre de la seriedad y el progreso. Que no es que diga yo, que soy más o menos listo que tú, sino que ambos dos deberíamos buscar la manera de tener sendas sonrisas en nuestras caras, y de aplaudir cada vez que veamos a otra persona sonreír, y decirle a los niños ¡se te ha puesto cara de listo! y animarles a seguir y a vivir contentos.

Estar contento es una fuerza que se opone al poder, una fuerza liberadora e igualitaria. Este proyecto es profundamente contrario a las fuerzas del poder. Parte de la confianza en la otra, se nutre del respeto a la diferencia, se sostiene en el apoyo mutuo, está centrado en el aprendizaje, en el encuentro y en la felicidad. ¡Oh, sí! otro gran tabú ¡la felicidad! Sí, sí “Caminando por a Vida” es un proyecto para compartir felicidad. Empezando por la felicidad de compartir, siguiendo por la felicidad del esfuerzo, por la de dormir bajo las estrellas, la de caminar juntas, la de reírnos juntas, la de darnos una mano, la de cuidarnos, la de interpelarnos… la de festejarnos, y festejar la vida y nuestra hermosa casa y nuestro encuentro. Estos días previos están llenos de emociones, ilusiones y algunos miedos, a todas con gran alegría se nos está poniendo cara de lista.
Yago